Asentada siguiendo la pendiente de la montaña, las vistas de esta villa invitan a armonizar los espacios con el paisaje y lo logramos gracias al empleo de materiales naturales y formas que generaban sensación de libertad incluso en el interior de la vivienda. Con un diseño de interiores creativo, conseguimos abrir las estancias al exterior y aprovechar la luz que brindan los largos días de la costa mediterránea. Materiales naturales como la piedra y las maderas nobles dan al ambiente el toque justo de calidez que necesita un hogar para que sus propietarios estén deseando llegar a casa.